martes, 31 de mayo de 2011

AUDÍFONO PEDIÁTRICO


SANTA FE Sábado, 28 de mayo de 2011

PRESENTARON EN SANTA FE EL PRIMER AUDÍFONO PEDIÁTRICO DE LA HISTORIA Y EL MÁS PEQUEÑO


Fue en el marco del XIII Congreso Argentino de Otorrinolaringología y Fonoaudiología Pediátrica que se realizó en el Hotel Los Silos. Las características de la innovación tecnológica.

L AUDÍFONO BABY TIENE LA CUALIDAD DE ALCANZAR HASTA 10 MIL CICLOS, UNA FRECUENCIA AGUDÍSIMA Y A UNA INTENSIDAD DE AMPLIFICACIÓN MUY IMPORTANTE. ASÍ SE OYEN A DISTANCIA LOS SONIDOS QUE SON SOPLOS.

Entre el jueves pasado y sábado, más de 1.500 fonoaudiólogos y pediatras de la Argentina y diferentes lugares de América participaron de un congreso en la ciudad. Se trata del XIII Congreso Argentino de ORL y Fonoaudiología Pediátrica, un evento que convoca año tras año a un número creciente de participantes y reúne conferencistas nacionales y extranjeros de gran experiencia en el campo de la otorrinolaringología y fonoaudiología pediátrica, así como de especialidades afines.

Entre los disertantes estuvo Alicia Zubizarreta, fonoaudióloga egresada de la UBA, asesora audiológica de Widex Argentina y fundadora de la Academia Widex Hispano Luxo Americana. Zubizarreta, invitada por la óptica Optilent, dialogó con Diario UNO y explicó que llegó al congreso para presentar “el primer audífono pediátrico de la historia y el más pequeño que hay en el mundo, que se llama Baby. Es un audífono estética y técnicamente diseñado para bebés de cero a tres años”.

Entre las características de diseño el audífono se destaca por su tamaño excepcional. Además, el chiquito no tiene acceso a la pila y la mamá sólo con una herramienta puede abrir la pila. La especialista agregó que “tiene una agarradera con la cual se lo puede atar a la batita del bebé para que si accidentalmente se le sale, no se pierda. También cuenta con un revestimiento siliconado que es resistente al agua, porque seguro que todos los bebés lo van a chupar, o la mamá cuando le lava la cara lo va a salpicar. Esas cosas normales y cotidianas están solucionadas.

La prevención

—En la actualidad, ¿qué porcentaje de la población de niños tiene problemas auditivos?

—Si tomamos la población sana son tres por mil los niños que pueden nacer con problemas auditivos de niveles que necesiten ser equipados con audífono para el buen desarrollo del habla y lenguaje. Si tomamos la población de alto riesgo, ya sea porque tienen antecedentes familiares, porque nacen con malformaciones, en esos casos suben a cinco por mil los chicos con problemas auditivos al nacer. Si a eso agregamos las hipoacusias que son unilaterales, que afectan sólo a un oído, hay que agregarle el 40 por ciento más de problemas auditivos que necesitan equipamiento.

—Con el desarrollo tecnológico puesto al servicio de los pacientes, ¿hoy se puede brindar otro tipo de atención?

—No sé si se brinda otro tipo de atención, pero sí puedo asegurar, porque hace muchos años que estoy luchando en este tema, que les brindamos mejores situaciones de adquisición de habla y lenguaje. Además, les brindamos una forma de oír naturalmente, ya que no estamos hablando de utilizar amplificadores de sonido que amplifican por igual los sonidos, la palabra y los ruidos. Si eso se hace en un bebé que no nos puede decir cuánto le gusta y cuánto no, se hace difícil saberlo.

—¿Qué otros problemas acarrea la falta de audición?

—La audición deficiente puede ser por muchas causas y de muchos grados, y no hay que asustarse. No hay que pensar que todo chiquito que tiene un problema auditivo va a ser pasible del uso de audífonos. Hay muchos problemas auditivos en el recién nacido y en el transcurso de la infancia que se van a poder corregir médica o quirúrgicamente. No es que todo chiquito al que se le detecta una pérdida de audición va a tener que usar audífonos e ir a una escuela especial. No hay que crearse un gran fantasma de problemas. Algunos se pueden resolver y los que no tienen solución médica van a usar audífonos y su uso temprano va a hacer que ni siquiera se necesite una educación en escuelas especiales. Hay que actuar rápido, correr contra el reloj para que no se atrase la adquisición del habla, no se atrase la adquisición de lenguaje, porque el lenguaje es pensamiento; y, después, que no se atrasen las situaciones de aprendizaje. Eso permitirá que madure año a año como corresponde a un chiquito que no tuvo problemas.

—¿Cuáles son los chequeos que deben realizarse a los recién nacidos para descartar o detectar a tiempo los problemas de audición?

—En este momento, en nuestro país que es un precursor en el tema, existe la Ley de Detección Precoz. La misma nos obliga a los fonoaudiólogos y a los pediatras, como seguidor del caso, a hacer la detección de la hipoacusia o determinar la sanidad de ese oído al nacer hasta el primer mes. Eso quiere decir que hay un margen hasta el tercer mes para aquellos casos en los que hay que rechequear esos primeros parámetros y que esté el chico a disponibilidad para hacerle un audífono y luego hacer la derivación a la enseñanza que necesite, según el grado de déficit auditivo o algunos problemas que pueden estar agregados.